Una maestra jardinera fue asaltada por tres motochorros en la localidad de Villa Luzuriaga, partido de La Matanza, cerca de las 8 de la mañana de este miércoles, mientras esperaba el colectivo de la Línea 242 en la parada de ubicada en la intersección de las calles Granaderos y Pasteur.

Los delincuentes -que fueron registrados por una cámara de seguridad- atacaron a la víctima para robarle. “Venía la moto y frenó atrás mío. Ahí fue cuando yo empecé a correr y me empujaron”, relató a TN Silvina, la protagonista del hecho. La tiraron al piso y la golpearon con un palo para sacarle la cartera, que finalmente lograron llevarse, luego de arrastrarla durante varios metros.

“Me querían sacar una bolsita en la que llevaba una cartuchera con útiles. Me resistí un montón”, explicó y agregó: “El ‘más chiquito’, cuando vio que yo me resistía, se bajó a dar los golpes”. Según lo que pudo distinguir la víctima, el mayor de los delincuentes tendría 16 años, mientras que los otros dos rondaban los 12 o 13.

Luego del robo, que no duró más de 10 segundos, los atacantes escaparon por la calle Pasteur, en sentido al centro de San justo, a bordo de la moto y con la cartera. Mientras tanto, la víctima fue socorrida por los vecinos de la cuadra, que habían sido alertados del hecho por los gritos y amenazas. Hasta el momento, los tres siguen prófugos.

Un hecho de características similares tuvo lugar hace pocos días en la localidad de Villa Adelina, San Isidro, cuando un hombre ingresaba con su moto a una estación de servicio Shell situada en avenida de Mayo y Wernike para cargar combustible, minutos después de las 20. En ese momento, fue interceptado por dos motochorros que lo apuntaron con una pistola y le robaron el vehículo.

La víctima, vecino de Boulogne, le entregó la moto al ladrón que lo amenazaba con un arma de fuego. Antes de escapar, los delincuentes hicieron un disparo al aire, pero nadie resultó herido.

La investigación quedó a cargo de la fiscal de Boulogne Paula Hertig. Mientras intentan identificar a los sospechosos, los efectivos policiales analizan las cámaras de seguridad públicas y privadas para tratar de reconstruir la vía de escape de los motochorros.