QUITO.– En una nueva serie de hechos violentos que se incrementan pese a un estado de excepción vigente, el Ministerio del Interior de Ecuador informó que nueve personas fallecieron y otras ocho quedaron heridas en un ataque armado al sur de Guayaquil.

El hecho ocurrió la noche del sábado en el sector del Guasmo, una populosa barriada del sur de Guayaquil, 270 kilómetros al suroeste de la capital.

De acuerdo con las versiones de los testigos, cerca de las 19 hora local, varios sujetos armados llegaron en un vehículo a la zona y dispararon en contra de un grupo de personas, matando en el acto a dos de ellas y otras seis fallecieron en una centro de salud debido a la “gravedad de las heridas”, indicó el ministerio en un chat de periodistas.

“Preliminarmente se manejaba una cifra de 8 fallecidos y 8 heridos”, agregó el reporte. A última hora de hoy la cifra muertos se elevó a nueve.

Por las circunstancias, se desplegó resguardo policial para los heridos que se encuentran internados en la casa de salud, señaló esa cartera de Estado, mientras se realizan las diligencias para “esclarecer este hecho”, añadió.

Esta nueva masacre ocurre un día después de que, en otra provincia costera, Manabí, unos 20 sujetos armados secuestraron a 11 personas y asesinaron a cinco de ellas. La policía reportó que las otras seis, entre ellas cinco menores de edad, fueron rescatadas y entregadas a sus familiares. Dos presuntos implicados fueron detenidos según un reporte policial.

El comandante local de la policía Richard Vaca dijo a los medios que unas 20 personas armadas habían participado en el secuestro al irrumpir en un hotel de la localidad ese mismo día.

Entre el grupo de turistas, que habían llegado a Ayampe por la tarde, había seis adultos y cinco niños. Las víctimas fueron sometidas a “interrogatorios”, dijo Vaca, y los cuerpos de cinco adultos fueron hallados con heridas de bala horas más tarde en una carretera cercana.

El comandante aseguró que las víctimas no tenían vínculos evidentes con organizaciones delictivas. Los atacantes “habrían confundido, aparentemente, a estos sujetos como sus adversarios en (...) la disputa de microtráfico en el sector”, dijo.

El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, afirmó más temprano en su cuenta de la red social X que lo sucedido en Manabí “nos recuerda que la batalla continúa”. Esto es una “muestra de que el narcoterrorismo y sus aliados están buscando espacios para atemorizarnos, pero no lo lograrán”, apuntó.

Cualquier ataque contra un ecuatoriano es un ataque al Ecuador.

Lo sucedido en Santa Elena y Manabí nos recuerda que la batalla continúa. La Policía Nacional se encuentra desplegada y como resultado hemos capturado a uno de los secuestradores de Ayampe, no descansaremos hasta… pic.twitter.com/2brJHWzmhB

Así, Ecuador enfrenta una nueva escalada de violencia que se produce en pleno estado de excepción y un conflicto interno armado decretado a inicios de enero por Noboa y que dispone operativos permanentes de un bloque de seguridad conformado por la policía y militares. Además, rige un toque de queda de cinco horas en los puntos de alta incidencia como Guayaquil.

Una semana atrás una joven alcaldesa de una pequeña ciudad, también de Manabí, fue asesinada junto a su colaborador, mientras el jueves un motín en una cárcel de Guayaquil bajo control militar y policial dejó tres reclusos asesinados y cuatro heridos.

Ecuador superó a finales de 2023 una tasa de 40 muertes violentas por cada 100.000 habitantes, una de las más altas de la región, según información policial.

En tanto, las autoridades ecuatorianas dijeron que fue capturado uno de los líderes de la banda criminal Los Lobos, una organización que estaría detrás del asesinato del candidato presidencial anticorrupción Fernando Villavicencio en agosto del año pasado.

Identificado como “Vicente S”, fue detenido por militares en la localidad de Ponce Enríquez en la provincia de Azuay, en el sur del país andino, informó el Ejército en la red social X. “El ciudadano mantenía una boleta de captura y difusión roja por parte de la Interpol”, añadió la entidad.

En la acción militar hubo enfrentamientos, dijo el Ejército, “resultando dos delincuentes heridos y 12 personas aprehendidas”. Se decomisaron 200.000 dólares sin justificar y varias armas de distinto calibre. Villavicencio, exlegislador y periodista activista, recibió un disparo mientras salía de un mitin en Quito, convirtiéndose en la víctima más destacada del aumento de la violencia en el país.

Agencias ANSA, Reuters y AFP