Titanic: qué se sabe de los 5 turistas que iban en el submarino que desapareció durante una expedición para ver los restos del barco
Los equipos de rescate trabajan a contrarreloj para ...
Los equipos de rescate trabajan a contrarreloj para localizar el sumergible desaparecido el domingo frente a la isla de Terranova (Canadá), en el océano Atlántico.
La cápsula se sumergió para llegar hasta los restos del legendario Titanic, asentados sobre el suelo marino a unos 3800 metros de profundidad. Una inmersión completa hasta el naufragio, incluido el descenso y el ascenso, dura ocho horas en total.
Pero, la tripulación de la nave Titán, perteneciente a la empresa OceanGate, perdió contacto con la base 1 hora y 45 minutos tras sumergirse en el mar, según informó la Guardia Costera de Estados Unidos. Este cuerpo, en conjunto con fuerzas canadienses, intentan localizar la nave, que tenía reservas de oxígeno para 96 horas en caso de emergencia.
OceanGate cobra US$250.000 por persona para su expedición de ocho días que parte de Canadá para ver los restos del famoso naufragio.
Hasta el momento, se confirmaron las identidades de tres de las cinco personas que viajaban en la nave, y hay indicios sobre los nombres de otras dos.
Hamish HardingEmbarcarse en la inmersión para ver los restos del Titanic requería dos cosas: espíritu de aventura y mucho dinero. El multimillonario británico Hamish Harding, de 58 años, tiene ambas.
Harding montó en el sumergible el domingo, según indicaron en redes sociales su empresa Action Aviation y su hijastro, Brian Szasz, en una publicación que posteriormente borró.
El explorador y turista espacial, que reside en Emiratos Árabes Unidos, es fundador del Grupo Action y presidente de Action Aviation, una empresa de servicios de ventas y operaciones de aviación con sede en Dubái.
Graduado en Ciencias Naturales e Ingeniería Química en la Universidad de Cambridge, es desde joven un apasionado del cielo y el espacio, por lo que se hizo piloto y paracaidista. En 2022 fue condecorado entre las Leyendas Vivas de la Aviación y es miembro de la junta de The Explorers Club, un reconocido club internacional de exploradores y científicos.
Harding viajó varias veces a la Antártida, a donde acompañó en 2016 al exastronauta Buzz Aldrin cuando este se convirtió en la persona de más edad en llegar al polo sur con 86 años.
En 2017 colaboró con la empresa de turismo de lujo White Desert para introducir el primer servicio regular de aviones privados a la Antártida.
Su espíritu de aventura lo llevó también al espacio. En junio de 2022 viajó a bordo del New Shepard en un vuelo sub orbital como parte de la misión NS-21 de Blue Origin, la compañía de Jeff Bezos.
Harding tiene tres récords Guinness: en 2019 dio en avión la vuelta al mundo más rápida a través de los polos; y en 2021, junto al estadounidense Víctor Vescovo, batió dos marcas de distancia y duración en máxima profundidad oceánica al descender a unos 11.000 metros en la Fosa de las Marianas.
Shahzada y Suleman DawoodEn un comunicado publicado este martes, la familia Dawood confirmó que Shahzada Dawood y su hijo, Suleman Dawood, se embarcaron en el viaje para visitar los restos del Titanic.
“Estamos muy agradecidos por la preocupación mostrada por nuestros colegas y amigos y nos gustaría pedirles a todos que oren por su seguridad mientras garantizan la privacidad de la familia en este momento”.
Shahzada Dawood, de 48 años, es de una de las familias más ricas de Pakistán. Vive en Surrey, al sur de Londres, con su esposa, Christine, y sus hijos Suleman, de 19 años, quien también viajaba en el Titan, y Alina.
Nacido en Pakistán, se mudó al Reino Unido donde obtuvo una licenciatura en Derecho en la Universidad de Buckingham.
Entre los roles que cubre, Dawood es miembro del Instituto SETI en California, cuya misión es explorar, comprender y explicar el origen y la naturaleza de la vida en el universo. Es miembro del Círculo de Fundadores del British Asian Trust, cuyo presidente es el monarca británico, Carlos III.
Las identidades que no se confirmaron oficialmenteLas otras dos personas en el submarino serían Stockton Rush y Paul-Henry Nargeolet.
El estadounidense Stockton Rush es toda una figura en la exploración de las profundidades del mar y presidente OceanGate, la empresa de submarinos tripulados para alquiler e investigación científica.
Desde su creación en 2009, esta compañía logró crear dispositivos capaces de alcanzar profundidades de 4.000 y 6.000 metros. Rush comenzó su carrera en el cielo, al convertirse en el piloto de jets de transporte más joven del mundo con solo 19 años en 1981. Tres años después se unió a la corporación McDonnell Douglas como ingeniero de pruebas de vuelo en el programa F-15.
Su experiencia en la industria aeroespacial y su pasión por los océanos cristalizaron en la fundación de OceanGate en 2009. Y en 2012 cofundó la Fundación OceanGate, una organización sin fines de lucro dedicada a impulsar avances en tecnología marina, ciencia, historia y arqueología.
En 1989 construyó un avión experimental Glasair III que sigue volando hoy. También creó un submarino para dos personas modificando un modelo Kittredge K-350.
El francés Paul-Henry Nargeolet, es una figura muy respetada en el campo de la investigación submarina. Excomandante de la Armada francesa, se unió al Instituto Francés para la Investigación y Explotación del Mar (Ifremer) en 1986 y un año después lideró la primera expedición de recuperación del Titanic.
Destaca su extenso trabajo en el lugar del naufragio del Titanic: como director de investigación submarina de las empresas Experiential Media Group y RMS Titanic, se lo considera toda una autoridad en lo relativo al histórico naufragio que tuvo lugar en 1912.
Fascinación y visitas durante décadas a un cementerio bajo el mar
Nargeolet lideró varias expediciones al Titanic, completó 35 inmersiones y supervisó la recuperación de 5.000 objetos, entre ellos una sección de 20 toneladas del casco del Titanic conocida como la “gran pieza” que hoy se exhibe en Las Vegas, EE. UU.
En 2010, lideró una expedición avanzada que creó el primer mapa de estudio integral del Titanic mediante un sonar de alta resolución, que produjo imágenes 3D de la proa, la popa y los restos esparcidos en el fondo del mar.