Mundo Djokovic: la evolución del tenista que venció a Federer y a Nadal, bajo la mirada argentina
Con 36 años cumplidos hace muy poco, Novak Djokovic asombra al mundo del tenis. Ganó con autoridad su tercer Roland Garros, se adueñó del récord de 23 títulos de Grand Slam –al tope entre l...
Con 36 años cumplidos hace muy poco, Novak Djokovic asombra al mundo del tenis. Ganó con autoridad su tercer Roland Garros, se adueñó del récord de 23 títulos de Grand Slam –al tope entre los varones- y recorre su semana 388ª como número 1 del mundo. Al menos desde lo estadístico, el serbio terminó con una larga discusión sobre quién es el mejor de la historia en el planeta de las raquetas. Sus números han superado, al fin, a Roger Federer y Rafael Nadal, sus rivales en el poderoso Big 3 que monopolizó el circuito masculino en el siglo XXI. El suizo ya está retirado, y el zurdo español, que se recupera tras una operación, busca encarar con afán competitivo la temporada 2024, que anunció como la última de su carrera. Mientras tanto, Djokovic sigue ganando.
No lucharon los tres juntos desde el comienzo, pero sí hubo varios momentos en los que el trío coincidió a pleno, y el tenis se vistió de gala. Comenzó una batalla por ganar títulos grandes, con el trono de la historia como meta. El tiempo transcurrió, y hoy Djokovic se sienta en ese espacio con el cetro en sus manos. Ahora, vale preguntarse, ¿cómo hizo el serbio para llegar más lejos que las otras leyendas? ¿Por qué superó esas marcas que Federer y Nadal habían forjado hasta parecer imbatibles?
Para el análisis de esta situación, Tito Vázquez, dos veces capitán argentino en la Copa Davis, bucea en la cronología. “La evolución tiene que ver con la generación de gente con la que le tocó jugar a cada uno. Djokovic tuvo que enfrentar a Nadal, Federer y a (Andy) Murray, y cada uno de ellos era el Némesis del anterior, así como cada uno empezó a destacarse un poco más tarde que el otro. Federer arrancó con el título de Wimbledon 2003 y hasta 2008 ganó 12 Grand Slams, unos tres por temporada, que es muchísimo. Nadal venció en el Roland Garros de 2005, pero no fue hasta 2008 que estuvo a la par para competir con Federer. Djokovic gana su primer grande en Australia en 2008, pero no se solidifica hasta 2011, ese año en el que conquistó tres grandes. Y desde ese entonces, teniendo que jugar contra los otros tres, es el que más ganó, 22 Grand Slams en 12 años”.
Vázquez, que como coach llevó al paraguayo Víctor Pecci a la final de Roland Garros 1979 y al número 9 del ranking, amplió su visión: “El juego de Nadal, con ese top sobre el revés, molestaba a Federer. Luego apareció Djokovic para complicar a Nadal con sus tiros cortos, contragolpeando, con un físico más flexible. Y después estuvo Murray, que le ganaba al serbio con la gran variedad de su juego. Lamentablemente el escocés tuvo un problema físico después de ser el número 1, y al lesionarse quedó fuera de la conversación del Big 3. Luego, hay que ver las épocas, ver quiénes son tus rivales. Es importante saber a quién le ganás. Djokovic enfrentó en muchas finales a Federer, a Nadal, a Murray. Eso influye en su crecimiento”.
Franco Davin, que siguió varias veces a Djokovic al otro lado como entrenador de Juan Martín del Potro, no duda: “Para mí es el más grande, sí. Por los números. Nole te sorprende todo el tiempo, como Federer, como Nadal. Son tres bestias. Djokovic ha ganado y ha perdido con los dos, pero en la suma de todo, les ha ganado a ambos en sus superficies, tiene más por todos lados. Hoy los pasa en números y todavía no paró. La diferencia se ve ahora frente a la camada actual, en lo mental es tremendo. Eso quizá no era tan notorio cuando estaban Federer y Nadal, que también eran iguales. Pero en este momento sí se nota mucho. No están los otros, y por ahí Novak dice: ‘¿con quién pierdo?’ Un poco como pasaba con Federer, una vez que lo vimos con Gastón Gaudio en Doha, y dijo: ‘Yo compito con fulano, con los otros no’, porque no estaban cerca de su nivel. ¿Y ahora, con quién compite Djokovic? La presión se la banca como loco. Fijate cómo lo destruyó a Alcaraz en Roland Garros”.
El actual coach de la rusa Veronika Kudermetova, 14ª del ranking mundial, le comenta a LA NACION: “Para lograr lo que hizo, tenés que estar al 100 por ciento todo el tiempo, y no es que Nole estuvo un rato. Lleva demasiados años. Por donde lo mires es más, y no terminó. Para mí, no son jugadores que las nuevas generaciones los puedan retirar, sino que ellos se están yendo. Pueden llegar a perder por estar grandes, no porque los otros jueguen mejor”.
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Y a propósito de Del Potro: el exnúmero 3 del ranking también habló del serbio en la charla que dio hace unos días en la ONG Aldeas Infantiles SOS Argentina. Allí, el tandilense contó: “En la final de Roland Garros se notaba que a Ruud le faltaba velocidad para vencer a Djokovic. Porque a Nole no se le puede ganar ni físicamente, ni desde el fondo de la cancha. La única manera era sobrepasarlo en velocidad, y sostener ese juego durante cinco horas, algo muy complicado. Rafa te transmitía una sensación de que no importaba el resultado, él ganaba. Y nosotros los veíamos así. Nunca cambiaba su gesto, aún cerca de perder. Nole, que es más temperamental, tiene sus momentos más débiles en las primeras rondas, por ahí es donde está más desconcentrado y siente más presión de tener que ganar y ser el mejor”.
The Big 3 & the Grand Slam race 🏆
2010:⁰16 - Federer⁰9 - Nadal⁰1 - Djokovic
2020: ⁰20 - Federer⁰20 - Nadal⁰17 - Djokovic
2023: ⁰23 - Djokovic⁰22 - Nadal⁰20 - Federer
🥇 @DjokerNole #RolandGarros pic.twitter.com/9Q1wJuMH2Q
“La primera vez que los enfrentás, te ganan con la camiseta, por respeto y por trayectoria. A mí me costó muchos partidos descolgar el póster de la pared. Pero después sabía que tenía un arma que a ellos no les gustaba: el juego potente. Cuando estaba derecho, en ese punto tenía mi oportunidad de ganar. Pero lo difícil era sostener ese mejor día durante una temporada completa, en semifinales y finales. Hice toda mi carrera al lado de ellos y pude crear una relación más cercana, además del tenis, porque son personas normales, igual que nosotros. Pero también tienen un talento único: pueden aplicar una fuerza mental superior al resto”, evaluó el campeón del US Open 2009, que sostuvo varias batallas épicas contra Djokovic, con cuatro triunfos y 16 derrotas.
Javier Frana, que actualmente asesora a Sebastián Báez, se refiere a las virtudes del serbio: “Djokovic tiene mentalidad y tenis, no alcanza con una sola cosa para llegar donde lo hizo. Parece que, cuanto más difícil es el escenario, más cómodo se siente. A Federer y a Nadal les plantó pelea cuando él estaba afuera de ese dominio. Y es como que dijo: ‘no voy a ser el más querido, pero les voy a ganar en resultados, y voy a ser el mejor’. El tipo tiene una cabeza que lo hace diferente, y eso es algo muy difícil de sostener también. Hay todo un trabajo en la parte física, más la experiencia y una parte de genética. Esa esencia la perfeccionó y evolucionó en todo sentido. Cuando arrancó, no le podía aguantar el ritmo a Nadal y termina venciéndolo en intensidad. Se puso como una motivación lo de luchar contra Federer y Nadal. Eso significa tener confianza y una fe sobrehumana en creer en poder hacerlo. Tener esa ambición de decir ‘los voy a alcanzar’ no es fácil”.
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El zurdo, con pasado de Top 30 y dueño del último título argentino en pasto en el ATP Tour (Nottingham, 1995) agrega una consideración: “Federer, Nadal y Djokovic nos acostumbraron en todos estos años a que siempre tiene que haber otro dominante. Y eso no es normal, es como tener tres Messis en la misma liga. El otro día, mi hijo me preguntaba: ‘¿Es mucho 23 Grand Slams?’ Y le respondí que ganar uno ya es una locura, son poquísimos los que ganan. Una vez yo llegué a los octavos de final y salí en todos los diarios. Vos alcanzás una semifinal grande y sos un crack. Ya ser un campeón de Masters 1000 te abre la puerta en todos lados, y Djokovic ganó 38. Son virtuosos en todo sentido. A veces vos sos la limitación, por no estar convencido, o no poder ver tus capacidades. Hablamos de personas que tienen algo especial, no se ponen límites. Nosotros sí, por ahí decimos: sí, pero…. Ellos no, y eso te da un seteo distinto del resto, vienen con otra configuración”.
Desde la parte técnica de Djokovic, José Luis Clerc, exnúmero 4 del ranking, analiza los puntos de desequilibrio del número 1 del mundo: “Es un jugador muy peligroso, con capacidad para reinventarse de un momento a otro. Te puede dar una posibilidad, como sucedió en el primer set de la final de Roland Garros contra Casper Ruud, pero después recuperó el quiebre, en el tie-break lo fulminó y ya no soltó las riendas del partido. Es muy difícil Djokovic en un Grand Slam porque tenés que jugarle tres sets de manera perfecta. Por ahí el tipo puede bajar un poco y enseguida retoma, y los puntos más importantes son los que mejor juega”.
“Después, tiene la mejor devolución de todos los tiempos. Federer, en un match-point a su favor en una final de Grand Slam, le sacó a la derecha a Nole, y este lo dejó seco con la devolución. No tiene un lado débil. Le podés jugar un poco alto a la derecha, como lo hizo Ruud al principio, pero es difícil mantener eso. Si acelerás, te viene un tiro más rápido; si pegás más duro, te viene otro bombazo. Si le peloteás revés contra revés, va a aguantar mucho, tenés que pasar muchas pelotas, puntos, games, sets… Te va desgastando física y psicológicamente”, agrega el ganador de 25 títulos profesionales.
Batata, además, añade la disciplina del serbio: “Nació para batir récords. Es muy consistente en su trabajo, desde la nutrición, la flexibilidad, el yoga, y la visualización, algo que trabaja mucho para ayudar al anticipo. Tiene una continuidad tremenda en sus entrenamientos, vos ves que no se sale de la raya desde hace 15 o 16 años. Marian Vajda –el coach que lo llevó a la cima- lo tenía como un hijo, le daba confianza, serenidad. Ivanisevic lo convirtió en un jugador más agresivo”.
Muchas veces se le elogió a Djokovic su capacidad física, esa elasticidad única, que le permite deslizarse como nadie –algo que aprendió durante su niñez, cuando practicaba esquí-, su capacidad de resistencia. En cuanto a su alimentación, mejoró notoriamente a partir del momento en el que supo que era celíaco y adoptó una dieta especial. “En el nivel tan alto que están, no se pueden tener falencias. Al mismo tiempo, es un privilegiado, que ha tenido pocas lesiones. Cuando era chico tenía el tabique nasal mal, y se cansaba pronto, y lo corrigió. Es un jugador muy plástico, y trabajó hasta tener una enorme resistencia, se puede ver que hace varios años que no pierde por cuestiones físicas”, explica Frana.
¿Hasta dónde puede llegar Djokovic? ¿Serán suficientes 25 títulos grandes, 26 o más? Tras ganar el Australian Open y el abierto francés, es el favorito para festejar en Wimbledon, y en el US Open, ir en busca del Grand Slam propiamente dicho: ganar los cuatro grandes en la misma temporada, algo que sólo lograron Donald ‘Don’ Budge, en la era amateur en 1938, y Rod Laver en 1962 (amateur) y 1969 (profesional). “Este puede ser un buen año para lograrlo, porque el más difícil era Roland Garros. Vuelve a pasar lo mismo que en 2021, que lo ganó todo hasta el US Open, y perdió la final con (Daniil) Medvedev. Por más que sos un monstruo, a veces la historia pesa. Después, a jugadores así generalmente los retira la edad. En el tour hay más plata que nunca, pero cuando fuiste tan grande buscás otra cosa, y Djokovic está jugando bien”, considera Tito Vázquez.
Para Frana, “si gana este Wimbledon, en el US Open va a jugar contra él mismo. Habrá que ver si no pasa como con Serena Williams, que llegó a los 23 títulos y no pudo superar los 24 de Margaret Court. Nole ya sabe que es superior a todos, pero ahora el desafío es otro. Hablamos de tipos muy especiales”. “Sólo le falta el oro olímpico, después ganó todo. Es el único que ganó tres veces cada Grand Slam en la historia. Ya le estamos pidiendo mucho, pero para este tipo es algo normal. Es incansable”, ponderó Batata Clerc. Dueño de marcas increíbles, Djokovic no agotó su hambre de gloria y va por más, mucho más.
Los increíbles récords de Djokovic388 semanas como número 1 del mundo (vigente y en progreso)7 años como número 1 al final de la temporada12 temporadas en las que llegó al número 1Más puntos sumados como número 1 (16.950)23 títulos de Grand Slam (máximo ganador)Único jugador que ganó 3 veces cada uno de los Grand Slams34 finales de Grand Slam y 7 o más finales en cada uno de ellosÚnico jugador que ganó todos los torneos de la serie Masters 100038 títulos de Masters 1000 (máximo ganador)12 finales ganadas en Masters 1000 de manera consecutiva6 títulos en ATP Finals o Masters de fin de año (compartido con Federer)245 triunfos sobre rivales Top 10Líder histórico en ganancias oficiales (US$169.762.762), sin incluir garantías ni contratos publicitarios